jueves, 28 de julio de 2011 0 comentarios

Algunas reflexiones en torno al “Culto de Acción de Gracias Evangélico”


Hay una frase muy interesante que reza “las buenas intenciones no son suficientes”.

Cuando un grupo de ciudadanos evangélicos compartimos nuestras preocupaciones éticas sobre la funcionalidad del CAG, no subyacen motivaciones de “boicot” que se sugiere está aún basado en un egoísmo o personalismo que busca una confrontación entre grupos dentro del movimiento evangélico con el propósito de dañar la unidad de la Iglesia. Hay una preocupación mayor, y algunas de ellas son: el equilibrio en el testimonio, la ecuanimidad y ponderación en el mensaje cristiano, la representatividad, que dicho sea de paso es multiforme; cosa que es difícil, sino hasta imposible, encerrarlo dentro de una celebración, pues ella misma por su naturaleza y definición propia no puede sobrellevar tamaña consideración.

La Iglesia en el Perú, no está dividida, está dispersa en una variedad de expresiones; y aun en ese mosaico de tradiciones, resaltan una variedad de características propias que precisamente la hacen una. No hay una sola manera de ser evangélico y mucho menos, tampoco hay una sola expresión de confrontar la maldad y el desorden. Somos así, opinamos y disentimos, y de manera especial en torno al complejo mundo que encierra el ejercicio ciudadano y el quehacer político. ¿Eso es malo? De ninguna manera, es saludable y enriquecedor.

Algunas razones por las que el Culto de Acción de Gracias pierde posición:

Su propia naturaleza:
  • En el contexto de la democratización. Las congregaciones locales cumplen un mejor papel democrático, y es desde ahí donde se cumple el propósito de la prédica y la oración, relacionando con mejores acercamientos el papel de la Iglesia y del Estado. Cuando el romanismo pensó en un Te Deum, éste surgió en el pensamiento jerárquico como una manera de mantener esa jerarquización en sus relaciones con el Estado. ¿Por qué no existe un Te Deum a favor de los alcaldes, presidentes regionales? ¿Cuál es el aporte del Te Deum a la democratización del país? ¿El Te Deum Evangélico se sostiene en un ambiente de democracia o es una imitación del romanismo.
  • En el proceso de inclusión social. Al aceptar unas ideas y rechazar otras, al incluir a unos y excluir a otros, se pierde de vista ese proceso que debería ser el marco referencial de la presencia ciudadana evangélica. Al estar en Lima la sede del ejecutivo, se pierde de vista el resto del país. Resultaría tedioso, por supuesto, que el Presidente tenga que viajar a otro departamento o región para participar de un Te Deum evangélico. Esa labor la hace mejor en sus tareas presidenciales. Es necesario romper con esa idea de sociedad exclusiva, pues rompe con la naturaleza de las comunidades de fe.
  • Como voz profética. Se necesitaría una especie de “Mensaje de 28 de Julio evangélico” que tome en cuenta la realidad evangélica, la situación de las demás confesiones, el panorama social y político en sus distintos contextos, etc., pues la oración que sigue al mensaje, se sostiene en los precedentes y en la situación presente. por oro lado, es peligroso cuando un Presidente acude a una cita religiosa como Mandatario, pues entra en tensión el juego político-religioso que es precisamente lo que ocurre hoy en el Perú en torno a la relación Estado-Iglesia. Cuando Pablo encargó a la Iglesia las súplicas y oraciones por los que están en autoridad, tenía en mente a la iglesia local, no una iglesia desigual en el marco de una ceremonia institucionalizada como el que se observa en el CAG cuya representatividad además es incierta.
  • La Unidad de la Iglesia. Debemos tomar en cuenta varios elementos que conjugan más allá del propósito del CAG. Hay una variedad de expresiones y opiniones, propias precisamente de la naturaleza misma de la Iglesia, especialmente en nuestro país que tiene características que hay que tomar en cuenta. El "divisionismo" no es producto de esas divergencias, sino de la "uniformización" de la Iglesia. De ahí que, tomando en cuenta esta variedad de situaciones, es que algunos se sentirán representados y otros no, y a ello, hay que añadirle los principios éticos que se han pasado por alto en la organización del mismo. ¿Qué es el verdadero espíritu cristiano? Una respuesta simple no va a ayudar a acercarse a esa múltiple realidad que se vive en todo el país, y por ende, en Latinoamérica y el resto de naciones. Por otro lado, cuando las congregaciones locales cumplen esa función que le ha sido señalada a la Iglesia en torno a los gobernantes, esa variedad se expresa en libertad y corresponde a las comunidades percibir su responsabilidad; pero cuando se institucionaliza esta responsabilidad, es natural que surjan puntos divergentes, especialmente porque las voces son múltiples, no uniformes. Es natural, que en un contexto tan variado, se cometa el error de pretender unificar el pensamiento, la visión, el modelo, lo que se resalta y lo que no. Ahí radica la gran diferencia entre el romanismo y el movimiento evangélico. El Te Deum Evangélico no une a la Iglesia, pero resalta su diversidad que hace temblar a los que sostienen esa "uniformización"
  • Oración por los gobernantes. Se ha llegado a confundir el sentido de la oración por los gobernantes. Una cosa es interceder por quienes están en autoridad, y otra es pretender presentarse como aquellos que les “encargan” ese mandato constitucional que sólo le concierne al Estado. La verdadera representatividad le corresponde a toda la nación, a todos los peruanos que participan en una contienda democrática siendo elegidos y electores. Bástale al Perú la prédica auspiciosa de los sectores católico-romanos. Si en la oración, no están todas las voces, todas las súplicas, todas las expectativas, deja de ser una oración, un clamor de la comunidad de fe para convertirse en la oración de un grupo, aunque de diversas tradiciones evangélicas, pero sigue siendo la de un solo grupo. Son las oraciones de los “santos” en todo el país, los que se han asociado con el corazón de Dios para este fin.
  • La promoción de un “Te Deum”. En una sociedad plural lo que una institucionalidad de esta naturaleza promueve es precisamente el auspicio de otros grupos confesionales para hacer lo mismo: islámico, judío, adventista, budista, … etc. Ahí no habría democracia, sino confesiones religiosas que buscan tener su parte en relación al Estado y su relación con cada una de ellas. La postura del cristianismo evangélico en Latinoamérica ha sido la búsqueda de igualdad en el trato, la equidad ante el Estado en términos de laicidad, no la imitación de los poderes que buscan afianzarse por medio de tradiciones religiosas donde el tema de fondo es el “poder”, no la oración.

No veo saludable un culto especial a nombre de toda la población evangélica, pues pierde la sustancia de la participación de toda la iglesia, y de la reflexión, a la luz de la palabra, de la responsabilidad ciudadana. La mejor riqueza ocurre en el seno mismo de las congregaciones locales. Es ahí donde ocurren los mejores procesos democráticos y de responsabilidad ciudadana, así como de representación y de corazones quebrados para elevar sus voces a Dios por todas las autoridades.

Cuando la institucionalidad causa división, ya no es saludable, sino que son expresiones de la propia naturaleza de su condición. Esa no es la riqueza evangélica, pues históricamente ella ha defendido la inclusividad, no la exclusividad. ¡Qué distinta es la imagen de las congregaciones locales en continua intercesión por las autoridades bajo el lente de las escrituras; una reflexión del acontecer sociopolítico, un compañerismo que se compromete y trabaja unido; y otra una imagen de un servicio institucionalizado en el que sólo se va a orar y tomarse fotografías!

¡Las buenas intenciones, no son suficientes
domingo, 17 de julio de 2011 0 comentarios

Sobre el pensamiento y protestas anti LGTB en Perú (Parte 3)

¿Cuáles son los alcances de vivir “en paz y tolerancia con personas que no tienen nuestras mismas creencias”? Dentro de un contexto de laicidad e igualdad, este principio de convivencia no sugiere ni mayorías ni minorías como un presupuesto para definir la aceptación o el rechazo de una ordenanza. Pero aquí se sostiene que el DIOS GUERRA, el DIOS ABSOLUTO ha colocado a un grupo de escogidos para dictar las leyes de conciencia de una sociedad plural, pero, al estilo constantiniano, inmadura e imperfecta, necesitada de regulaciones morales. Esta percepción absolutista, ve a los demás como enemigos absolutos a quienes hay que derrotar. Cualquier grupo minoritario, será medido bajo esa cosmovisión de ABSOLUTOS … y con esa precisión querrán imponer sus ideas; que en el caso peruano, es precisamente un escollo para la convivencia democrática en temas de religión y creencias. Creo que la psicología, la sociología, la antropología, la historiografía, pueden dar un aporte significativo sobre estas conductas y percepciones propias de estos grupos y sus presupuestos ideológicos, que se habían pensado habían sido superados, pero sobreviven en contextos distintos donde se requiere aperturas.

La pregunta, ¿Entonces su sugerencia seria obviar el resto de ciudadanos que no están de acuerdo con la cultura LGTB? Es una expresión absolutista que evalúa el principio de igualdad bajo parámetros de referéndums y marchas, yo no como un derecho en sí mismo al alcance de todas las expresiones. Si creíamos que el “Muro de Berlín” había caído en la historia de todas las naciones, aquí se evidencia que sigue siendo un coloso en la conciencia de muchos peruanos, y cuando esperábamos que fiel a su historia, sean precisamente los movimientos del protestantismo latinoamericano, los que ayuden a construir sociedades más justas, aquí se impone la ideología conservadora y militante al estilo del cura Valverde y sus aliados, que trajeron los ABSOLUTOS  del Dios de la Corona imperial en guerra contra de Wiracocha que muy bien describe Juan A. Mackay en su obra “El otro Cristo Español”.

“Así como los LGTB tienen derecho a expresar su voz, los creyentes en Dios también tienen derecho a expresar su voz.” ¿Qué significa la frase “los creyentes en Dios”? Ya mencionamos previamente esa forma bipolar de entender las culturas y el desarrollo de las naciones, esa dicotomía fundacional de las creencias, en el que por un lado están “los creyentes en Dios” y en el otro, el resto de la sociedad peruana, dando a entender que un LGTB es un creyente de cualquier cosa, menos de Dios. Esto nos da una idea de la imagen fundamentalista que se construye en el interior de estos grupos que precisamente han hallado cabida en la conservadora expresión de otras creencias que sostienen estas tradiciones antiguas, especialmente, la romana católica.

“Hay una gran diferencia entre la separación del estado y la iglesia y la separación de Dios del estado, esto jamás.”  ¿A qué Dios se refiere? ¿Al que trajeron los españoles? Un Dios ABSOLUTO  a la medida de los conquistadores y la minimización y ridiculización de las demás creencias. Un Dios que impuso el idioma español por encima del quechua, el aymara, el ashaninka… Un Dios que se impuso a filo de espada y tiro de rifle … Un Dios que requiere de un ejército para saquear y cometer abusos … Antes de la llegada de los españoles, ¿Estaba Dios en el Continente? ¿Qué Dios? El que se manipula bajo ideologías y se abusa en el uso indiscriminado de los textos bíblicos. Ese Dios … no es el de la cruz, sino el de la espada. Es la ideología de Torquemada y sus aliados. Esa expresión de paz y tolerancia, es sólo un cliché.

¿Qué confunde a los niños? ¿Una sociedad que se norma y se regula bajo leyes igualitarias y de respeto, o una impositiva que usa el factor mayoría para abusar de las minorías? Lo que en cierta manera, esta ordenanza municipal, no Estatal, como se sostiene erróneamente, ha puesto al descubierto es: La incapacidad del liderazgo de cierto sector evangélico y católico romano para sobrellevar la convivencia con todos los sectores de la sociedad, la debilidad de sus grupos nucleares que no trascienden ni pueden influenciar en el desarrollo de la nación sino sólo bajo “mano dura”, la inconsistencia de sus formas de gobierno eclesiales en las que sólo un grupo de iluminados dirigen el destino de sus feligreses, la incapacidad de sectores evangélicos de ser “sal y luz” en relaciones igualitarias, la total dependencia de esos ABSOLUTOS que no ayudan a un mejor acercamiento al tema LGTB y otros más, sino sólo a través de leyes injustas y represivas. ¡Qué lástima esa ilusa reflexión sobre los impuestos de todos los peruanos! Esperamos, si hay equilibrio en sus posturas y declaraciones, realicen marchas para reclamar la derogación del Concordato, donde sí se usa esos fondos para sostener al clericalismo en el Perú, en clara discriminación con las demás confesiones religiosas. No es libertad de conciencia  lo que estas objeciones presentan y defienden, sino la debilidad propia en la formación de sus miembros, de sus creencias y su misión. El miedo viene por esa inconsistencia, por esas debilidades. El respeto no necesita ni imposición ni escollos, ni muros, sino fortalezas y riquezas socioculturales que se expresan y se manifiestan en la convivencia.

¿Casacas rosadas? ¿Niños imponiendo el uso de casacas rosadas? ¿Una forma de Buylling homosexual? ¡Qué imaginación! Producto de los miedos y esas inconsistencias, se sostiene de alguna manera, que es mejor el abuso heterosexual antes que el homosexual, pues el primero, es de las mayorías. Se sostiene la idea que con una afirmación igualitaria, se va a homosexualizar a toda la nación. Sólo una idea medieval puede afirmar tales inconsistencias. Así se pensó acerca de los derechos de la mujer y de los negros … mas bien producto de un machismo y un racismo que no tenía fundamento.

El Perú y Latinoamérica del siglo XXI necesitan de teologías que contribuyan a cubrir esos vacíos que hoy son importantes, y que ayer no eran tan evidentes como ahora. No hay tal hecho de lobbys o intereses, sino de reflexionar en libertad y sin ataduras teológicas del pasado para expresar al Cristo de la historia y Señor del Cosmos, como soberano. ¿Tiene Dios sexo? ¿Cuál? El término “Naturaleza Humana”, que ha sido sostenida y desarrollada precisamente a lo largo de la historia, ¿cómo y cuándo comenzó a usarse? ¿Por qué ese temor a hacer una nueva teología para el tiempo presente?





(*) Esta serie se corresponde a una charlas sostenidas en el facebook acerca de la ordenanza municipal de Lima - Perú y las marchas anti LGTB.
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Sobre el pensamiento y protestas anti LGTB en Perú (Parte 1)

Cuando un LGTB acude al ánfora a depositar su voto, no asiste sino "para ser reformado", su voto es la autorización constitucional para ser puesto en observación y a prueba, sin dignidad, pues el Perú tiene una cultura "heterosexual", y es mayoría ... y la mayoría dice NO. !Qué contradicción! Por un lado en la entrevista se afirma que los temas de DDHH no se decide por mayoría, sino por principio... pero, igual, la mayoría manda.

¿Existen limitaciones en la definición de DDHH? ¿Cuál es el alcance de la norma constitucional? En el contexto de un país laico, ¿quién decide lo que debe ser incluido o no dentro del principio? ¿La Iglesia? ¿La sociedad? ¿La mayoría? ¿La minoría? ... ¿la cultura heterosexual? ¿la homosexual?

‎11 —No todos pueden comprender este asunto —respondió Jesús—, sino sólo aquellos a quienes se les ha concedido entenderlo. 12 Pues algunos son *eunucos porque nacieron así; a otros los hicieron así los hombres; y otros se han hecho así por causa del reino de los cielos. El que pueda aceptar esto, que lo acepte.
Mateo 19:11, 12

Este pasaje que no es desconocido, y del que seguramente se ha usado y abusado muchas veces. Ante la presencia del pasaje en mención, se suele responder prematuramente sin darle el correcto examen exegético en toda su dimensión. ¿Cuál es la afirmación que desde él se plantea, y en el que el propio Jesús añade algo que no era parte de la pregunta? Si nos guiamos sólo por las preguntas e inquietudes de los discípulos, entonces le quitamos también el mérito de la respuesta de Jesús a Nicodemo. 

La reacción de muchas personas al texto y al tema suele ser una justificación a una postura y al propio pre-entendimiento, creencias respecto al grupo LGTB. Si nos acercamos al pasaje, como se está diciendo en estos días, desde una cultura heterosexual, entonces hallaremos un tropiezo en esta pasaje. 

Se ha sugerido sobre el asunto de los eunucos que se trata de un grupo quienes sexualmente eran "impotentes" ¿Impotencia? Dios creó a algunos impotentes? Creo que hay ahí una distorsión.

¿Dios es trascendente? ¿Es transexual? ¿Está más alla del sexo? ¿Qué es la virilidad? Espero no se entienda esto como una "ideología homosexual" ni mucho menos. El diálogo está abierto.

(*) Esta serie se corresponde a una charlas sostenidas en el facebook acerca de la ordenanza municipal de Lima - Perú y las marchas anti LGTB.
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Sobre el pensamiento y protestas anti LGTB en Perú (Parte 2)

Después de una lectura de algunas expresiones publicadas en el facebook de uno de los promotores de  la marcha del día jueves 14 de junio, resaltan frases como: “Rotundo rechazo”; “el verdadero cristiano”, “La verdadera iglesia está unida en un punto en común”, “Con Cristo siempre seremos mayoría”, “Verdaderos representantes”, “lobby internacional infiltrados”, CONAPFAM es la unión de todas la fuerzas”, “Usualmente la gente con poca capacidad reflectiva e intelectual se lleva por la tangente y piensa que este es un tema netamente de la "no discriminación" no podrían estar mas lejos de la verdad”

¿De eso se trata entonces todo este discurso y las marchas? ¿Lo que está en juego no es la dignidad de las personas, la protección de las familias (que ya no son nucleares) y el cuidado de los niños? Toda esta expresión se trata de la búsqueda y la obtención del PODER.

Pienso que lo rotundo de estas marchas tiene que ver mas bien con la teología detrás de ellas que tiene mucho de conservadora y coincide con el sentir de otros sectores y las creencias de muchos peruanos, pero no necesariamente es justa y equitativa. Por otro lado, es precisamente, un lenguaje que evita el diálogo y condena a la persona que piensa de manera diferente, insinuando que tal punto de vista, es la de un cristiano falso.

Al unir todas estas expresiones vertidas en las marchas y colocadas aquí en el Facebook, expresan no un asunto de principios, sino institucionalizado, de las antiguas jerarquías y la lógica bipolar: ¿estás de acuerdo o estás en contra? No hay punto intermedio para entender los conflictos y la resolución. Todo lo que hace el gobierno está bien o está mal. Un pensamiento así, lo que crea es una realidad ficticia porque la vida de la persona está en el medio. Lo real es que hay cosas con las que estoy de acuerdo más y otras en las estoy en desacuerdo. En una cultura bipolar se pierde esta distinción. Si como sostienen, el poder emana de varias vertientes, de muchos lugares, no porque abarca todo, sino porque está en todas partes. ¿Por qué se intenta sostener un único centro de poder? Eso sólo se asemeja a la postura constantiniana. El poder está en todas partes, son múltiples espacios compitiendo entre sí. Sólo una postura así, discrimina las opiniones de los demás, y al mismo tiempo sugiere la ausencia de reflexión e incapacidad intelectual, muy al estilo de los autoritarismos. La insinuación sigue siendo clara, esa distinción de posturas es oportunidad para deslegitimar al otro, a tal punto de ubicarlo en la línea de la incapacidad mental y reflexiva.

Destaca una fraseología de militancia mas bien religiosa en la que Dios mismo está marchando al frente de estas manifestaciones; es decir, el pleito es una lucha de dioses y diosas, y no sé si contra demonios también. La mayoría de los que han ido a las marchas tenían letreros como “Sodoma y Gomorra” “Varón y Hembra” … es decir, no era un tema de igualdad, sino ideológico, de creencia, de confesión de fe.

¿Por qué se usa a la gente?

En lo religioso, la seducción y el coqueteo con lo político significa imponer el poder espiritual por encima de lo terrenal al estilo de la edad media, la posición de la iglesia como si fuese lo único valioso y deseable. La derecha evangélica en Latinoamérica, ha ido de la mano con desayunos presidenciales y Te Deums, donde las instancias políticas promueven un gobernante que lleve los postulados morales y obtener así privilegios para sus correligionarios. ¿Cuál es la agenda detrás de la búsqueda del poder político de las entidades evangélicas? ¿Era necesario tal expresión de las marchas? ¿El diálogo está roto?

Si un sector de la iglesia católica apoya esto, no toda, como se sostiene, es por el tema institucionalizado, además de la estrategia de no tocar el Concordato. ¿Estas personas apoyarán la anulación del Concordato con la misma efervescencia en la búsqueda de igualdad y justicia para todas las confesiones religiosas? ¿Cuáles son las consecuencias e implicancias histórico-sociales de los beneficios del Concordato para un sector del país? Usarán la misma lógica que se usa aquí … en el Perú, la mayoría es de Confesión Católico-Romana.

Lo lamentable no es la posición del CONEP o de alguien que discrepa con estas propuestas, sino la manifiesta intolerancia y el uso de lo religioso e ideológico como estrategia de fuerza, y aun de amenaza, sólo que ella no tiene la misma consistencia en otros asuntos de interés nacional. Las instituciones, según lo expuesto, tienen validez, no por su consenso logrado a través de la reflexión y el análisis, sino por acceder a ciertos grupos “mayoritarios”.

También es notorio el lenguaje, que desde la perspectiva de la propaganda tiene motivos tendenciosos y sensacionalistas. Se describe al homosexualismo como el paradigma del mal que avanza y hay que detenerlo, a los que se identifican con esa conducta y a los que de alguna manera cuestionan ciertos mecanismos que justifican un trato injusto hacia esa comunidad. En otras palabras, lo que deteriora a las familias no es ni el machismo, ni la violencia física o verbal, ni el silencio y complicidad de algunos que permiten la pedofilia, no es la trata de personas, no es la desnutrición … es el homosexualismo.. el rostro del mal y deterioro de las familias …. ¿nucleares?

Si el ser humano es la imagen de Dios, ¿cuál es el sexo de Dios? ¿es varón? ¿es mujer? ¿es una diosa?

¿No son válidas también las preguntas sobre el uso de la niñez en expresiones como las que se vienen dando para sugerir un anticuerpo sobre la población LGTB? Las pancartas, los volantes, y las propias palabras de algunos expresaban una intencionalidad mas bien religiosa y fundamentalista.




(*) Esta serie se corresponde a una charlas sostenidas en el facebook acerca de la ordenanza municipal de Lima - Perú y las marchas anti LGTB.
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